¿Cuál fue el reto o problema a resolver?
En este proyecto llevamos a cabo una investigación de ingeniería forense centrada en comprobar y autentificar unos componentes electrónicos, o por el contrario, detectar falsificaciones. Al realizar pruebas en sus PCBs, el cliente había detectado algunos fallos, lo que le hizo pensar que algunos de los elementos empleados no cumplían con las especificaciones de su ficha técnica y, por lo tanto, podrían ser fraudulentos.
Una vez establecidos los protocolos del procedimiento a seguir, pudimos verificar la base y los elementos interiores de los componentes, determinando si se había producido una falsificación o un defecto de fabricación en las piezas.
El equipo de Innovación en Materiales comenzó realizando una búsqueda bibliográfica de la información existente sobre las normativas homologadas de autentificación de los elementos a analizar. Tras estudiar la documentación encontrada, se diseñó un protocolo de actuación con las técnicas más adecuadas para este proceso.
En primer lugar, se efectuaron una serie de pruebas con técnicas no destructivas, comenzando por las técnicas de análisis menos invasivas. De esta forma, se podían mantener las muestras lo más intactas posible antes de utilizar medios más agresivos.
Una vez concluida esta etapa, procedimos a desarrollar ensayos más destructivos que permitieran llegar al interior del componente. Esto nos permitió comprobar en detalle su base, sus elementos interiores, y su composición química, estableciendo si existía algún fallo de fabricación y si los elementos cumplían con las indicaciones establecidas por el fabricante.